La Jaiba Brava y el Irapuato empataron 0-0 en el partido de ida de la gran final del Torneo Apertura 2025 de la Liga de Expansión, disputado en el estadio Sergio León Chávez. Fue un encuentro intenso, cerrado y marcado por la tensión propia de una final, aunque sin goles en el marcador.
Con este resultado, todo se definirá el próximo sábado en el Estadio Tamaulipas, donde el conjunto de Tampico Madero buscará hacer valer su condición de local con el apoyo de su afición.
Desde el silbatazo inicial, el duelo se jugó con alta intensidad. El inmueble irapuatense lució lleno y, apenas a los diez minutos, el sonido local solicitó a los asistentes no permanecer en las escalinatas debido a la gran afluencia. El ambiente era digno de una final.
Irapuato tomó la iniciativa en el arranque, intentando inclinar la cancha con transiciones rápidas hacia el frente. Sin embargo, la Jaiba Brava ajustó líneas y, al minuto 21, se presentó la primera jugada polémica cuando Pablo Rangel cayó dentro del área tras un mano a mano con el arquero local. La afición reclamó penal, pero el árbitro decidió continuar con las acciones.
La respuesta del equipo tampiqueño llegó al minuto 30, en una jugada clara que obligó al guardameta local, conocido como “El Gansito” Hernández, a intervenir de manera oportuna. Conforme avanzó el primer tiempo, la Jaiba comenzó a ganar terreno y a incomodar a la Trinca Fresera en su propio campo, aunque sin poder abrir el marcador.
Antes del descanso, Irapuato tuvo una última aproximación que nuevamente fue contenida por el portero visitante. El primer tiempo concluyó con un 0-0 justo, pero cargado de tensión.
Para la segunda mitad, el conjunto dirigido por Bora Alcantar adelantó líneas y salió decidido a romper el empate. En los primeros minutos generó opciones claras frente al arco rival, pero sin la contundencia necesaria. Posteriormente, la Jaiba Brava ganó mayor presencia y fue entonces cuando “El Gansito” Hernández se convirtió en figura al realizar al menos tres atajadas determinantes entre el minuto 9 y el 24 del complemento, incluyendo un mano a mano que salvó a su equipo.
Irapuato también estuvo cerca de marcar al minuto 34, cuando Ricardo Peña conectó un potente disparo de zurda que pasó apenas a centímetros del poste, provocando el suspiro colectivo de la tribuna. Fue la oportunidad más clara para los locales en la parte final del encuentro.
Los cambios realizados por ambos técnicos no modificaron el rumbo del partido, que se mantuvo trabado, físico y sumamente táctico, con dos equipos conscientes de que cualquier error podía decidir la serie.
En los minutos de compensación, Irapuato insistió con envíos al área y presión alta, pero el empate sin goles ya estaba sentenciado. Los jugadores abandonaron el terreno de juego con la certeza de que la final está completamente abierta y que será en Tampico, Tamaulipas, donde se escribirá la última palabra por el título.
Fotos: Richard Vogel






